Acabo de terminar de leer un artículo que afirma
categóricamente, entre otras cosas, que la creencia en lo espiritual no existe
sino en la imaginación y necesidad de los propios seres humanos.
He conocido a personas que viven su espiritualidad de manera
tan positiva que realmente me han hecho plantearme si vivimos en el mismo
mundo, he llegado a pensar que mi sentimiento de espiritualidad no era tal al
oír y leer a estas personas.
He conocido a personas espirituales tan negativas que he
llegado a pensar que era preferible aferrarse a lo material y dejar de sufrir,
por cierto sin éxito, por personas ajenas a ti.
He conocido a
personas que no son para nada espirituales ni sienten ningún interés por este
tema.
Lo que nunca me hubiera podido imaginar, es que en el día de
hoy, una experiencia que tuve hace nueve
años y que fue la más traumática que haya vivido jamás y que me dejó haciendo
malabares durante 7 años tratando de encontrar el equilibrio en la línea que
separa la cordura de la locura cobrara todo su sentido.
De repente un montón de ideas de alguien son solo un montón
de letras afirmando una “verdad” que si bien es obvia para la mayoría de los
pensantes no lo es tanto para unos cuantos experimentantes, por llamarlo de alguna manera, al menos para ésta.
No me considero una sufridora cristiana buscando la
recompensa del cielo ni nada remotamente parecido. Piense el pensante lo que le
salga de los huevos.
Ni tan siquiera me considero una persona que lance amor al
universo para que el universo le devuelva amor, piense el espiritual asimismo
lo que le salga de sus sacros genitales.
Pero gracias a esa experiencia que me jodió la vida durante
tiempo se muy bien el empuje que me mueve y he aprendido… algo que tal vez me
vale solo a mi aunque sea algo que pertenece a todos.
Ahora entiendo el rechazo de unos y de otros, hasta el mío
propio.
Pero sobre todo acabo de aprender que no puedo seguir el
dogma de las letras de una biblia o un libro, aunque termine siendo excluida de
todos los lados y por no pertenecer a ningún grupo o incluso sola.
Soy lo que soy, lo que mi pasado ha hecho de mí, las
expectativas que tengo para mi futuro totalmente condicionadas por mis
experiencias pasadas.
Si mis “malas vibraciones” te repelen pues ya sabes y si mis
“buenas vibraciones” te saturan un tanto de lo mismo. Total sea como sea o haga
lo que haga voy a ser juzgada
A veces hace falta tan solo un lugar solitario en la
naturaleza, un poco de silencio y un soplo de aire fresco para darte cuenta de
algo tan especial que cuando tratas de transmitírselo a alguien termina
convirtiéndose en un montón de letras afirmando otra verdad y que nadie
entiende o al menos tal como lo tratabas de transmitir… y aquí las dejo.